Si metemos en una coctelera al séptimo y al octavo clasificado de la segunda categoría del balonmano nacional, ambos con opciones de jugar la fase de ascenso a la liga Asobal, separados por un solo punto, con únicamente dos partidos para concluir la liga regular y añadimos el aderezo de la rivalidad deportiva inherente a todos los partidos entre vecinos, nos encontramos con el mejor partido de balonmano que puede verse en Cantabria y el más apasionante de las últimas temporadas.
El Balonmano Torrelavega visitará el pabellón exterior de la Albericia para enfrentarse al Adelma Sinfin en el segundo derbi cántabro de la temporada en la División de Plata. Un partido que marcará decisivamente las opciones de 
ambos clubes en la última jornada de liga. Ganar supone, en el caso de los torrelaveguenses, mantener vivo el sueño del ascenso independientemente de lo que hagan el resto de rivales.
Los pupilos de Diego Soto llegan al partido después de dos victorias consecutivas y en uno de los mejores momentos de la temporada. Los naranjas saben que si ganan los dos partidos que restan para concluir la fase regular tienen muchas opciones de pelear por el ascenso. Algo inesperado a principio de campaña pero que se ha convertido en un objetivo real al que no quieren renunciar.
Para intentar salir airoso de la Albericia, el equipo de Torrelavega no podrá contar con Joaquín Marcos. El lateral ha sido operado de los ligamentos de la mano derecha y tendrá que ver el encuentro desde la grada. A buen seguro, Marcos será un miembro más de la Marea Naranja en el recinto santanderino. La afición torrelaveguense está muy ilusionada con el partido y se espera un desplazamiento numerosos de seguidores naranjas a la Albericia.
Andrés Peñaranda y José Antonio Yagüe serán los encargados de dirigir un partido que comenzará a las 17:15 horas.
